Crónicas en Catalunya, año de gracia 2016 dc.
Actualmente es gobernada por un 'president' al que se le conoce por 'Menos', en el año 2012 hubo otro que se llamaba ‘Más’ y al pueblo catalán como ya les pimplaba la política y conocido su sentido del humor, decidieron elegir por ese nombre al sucesor, con lo que Mas se enfadó bastante con los votantes que para regodearse votaron al sr. Menos y les solicitaban que hicieran careos en debates televisados, sin mentar cuando los sres 'Mas y Menos' comparecían en la Cámara.
El tal Más decidió un buen día que dadas sus habilidades como estadísta de éxito, su región debía tener la categoría de país y propuso a sus ciudadanos ser el cabecilla de gran experiencia y valor que les llevaría a conquistar grandes metas, para lo cual organizó unas elecciones 'especiales' en las que asumiriamos su liderazgo absoluto, pero como su gestión en solo dos años produjo el déficit jamás soportado por un país, elevar la deuda a la categoría de bono basura, deslocalizaciones de las mejores empresas, el cierre de hospitales y quirófanos, quitar pagas a los funcionarios, aumentar los impuestos e inventarse nuevos impuestos hasta niveles confiscatorios, superando el diezmo la Edad Media, pero eso si, sin quitarse asimismo ninguna plebenda y cobrando el sueldo más alto de todos los estados conocidos, el resultado fue que perdió 12 diputados, no contento con hundir a su partido, decidió entonces hundir a su pequeño país separándolo de Europa, para al menos ser recordado por algo.
Si había algo que desesperaba al sr. Mas es que nadie le hiciera caso, ni en su propio partido, ni en España, ni en Europa, ni en el mundo, algún dictador y algunos amigos agradecidos de cuando les invitaba con sus copiosas dietas en viajes a hoteles de ensueño en paraísos exóticos con la misión de vender sus grandielocuentes planes.
Como los de su propio país le ignoraban completamente, por su cuenta y riesgo iniciaba escaladas verbales y amenazas tíldando de antidemocráticos a todos los que no pensaban como él, sus propios conciudadanos estaban estupefactos con tan curioso comportamiento pero seguían sin hacerle caso.
He aquí que en un país un tanto lejano llamado Crimea perteneciente a Ucrania, en dos días se organizó un plebiscito y de una forma fulgurante (ayudados por unos cuantos miles de tanques), declararon su cambio de país, (anexión a la federación rusa).
Por lo tanto el miedo se apoderó de él, para que no le robaran la idea de independencía en ningún país mas, salió al balcón y ahuecando la voz dijo:
-“Catalanes i catalans, a partir d'avui catalunya es independent”
No pasó nada, la gente seguía circulando por la Plaza Sant Jaume indiferente y pensando en sus cosas.
Se dio cuenta de su error, se había olvidado de enchufar el micro al amplificador, repitió el mensaje, esta vez el mensaje retumbó contra las paredes, pero nada, nadie miró hacia arriba mientras el aparecía con sus brazos en cruz y en pose apostólica. Al cabo de varias horas y varios cientos de mensajes infructuosos mas.
Llamó a la Moncloa y tras hacerle repetir el mensaje varias veces pues el conserje era un poco sordo, se oyeron unas sonoras carcajadas. Avisó a los medios de comunicación extranjeros, le dijeron que si acaso un día de estos lo publicaban, que hoy en día lo de los paises nuevos ya no era novedad.
Por lo tanto decidió actuar, no podía soportar tamaño ninguneo.
Convocó al ejército, pero como no había no se presentó nadie, llamó a Hollande por el teléfono rojo, cuando le planteó que le dejara el ejército francés unos ‘días para un asuntillo’ para no se que invasión en España, François pensándose que era una broma de su colega catalán le dijo que los catalanes son muy cachondos y que ya que no podían pagarle, La Cerdanya y Cadaqués pasarían a la jurisdicción francesa.
Aceptó de inmediato puesto que estaba quedando en el ridículo mas espantoso (la megalomanía es el motivo de casi todas las guerras) y se inició una de las guerras mas curiosas que se conocen:
La Batalla del “All i Oli”.
Los soldados españoles atrincherados observaban como desde unas torres humanas de 6 o 7 pisos les lanzaban bolsas con un líquido amarillento de un olor apestoso, rápidamente se corrió la voz:
- ¡Armas químicas! ¡Las máscaras antigás rápido!
Se colocaron las caretas, estos 'catalans' jugaban sucio empleando lo peor de la guerra química, tras unos primeros análisis se dieron cuenta que les estaban atacando con aceite y ajo, una treta por lo cual se ordenó retirar las máscaras, justo en el momento en que desde dichas torres humanas (que ellos llamaban ‘Castellets’)
Ahora les tiraban como una lluvia espesa, los morteros y mazos empleados en fabricar el anterior mejunje, con que las fracturas craneales estaban a la orden del día, lo cuál hizo que se batieran en deshonrosa retirada, el cielo estaba plagado de globos aerostáticos provenientes de Olot, sembraban la confusión, tirando llescas de 'pan amb tomaquet', y un tal Lluis Llach cantando:
-Asesiiiiins, Asesiiiins ¡
Y una serie de canciones de protesta, amplificadas por megáfonos, lo cuál provocaba pitídos en los tímpanos de los combatientes.
Pero eso no fue nada comparado con la parte fuerte del conflicto, soportada por los ‘pagesos’, los cuales atiborrados de un producto sumamente inflamable llamado ‘butifarra amb mongetes’ se dedicaban a metabolizar en su intestino gas metano que mediante una serie ingeniosas tuberías en territorio enemigo provocaba mareos y vómitos.
En las trincheras los supervivientes son abordados por 'els botiguers', que aprovechan para vender sus baratijas.
Fue una guerra atípica en la que ni franceses, ni españoles estaban interesados en seguir, en los medios de comunicación extranjeros se trató con hilaridad, no en crónicas de guerra sino en los espacios de humor, disparando las audiencias, al fin y al cabo un territorio con esos impuestos, esos olores, y unos dirigentes incompetentes, numerosos y desproporcionadamente bien pagados no conviene bajo ningún concepto una guerra, los propios catalanes tienen al enemigo en casa.
Por lo tanto se firmó un armisticio inmediato y se declaró Catalunya ‘independent’, sin más trámites, ni referéndums, ni complicaciones.
Ahora el ‘president’ Menos está convocando a los partidos políticos (CIU se extinguió tras la curiosa gestión de Mas), para organizar un Referendum en España y otro en Francia a ver quién se hace cargo de este pequeño país tan simpático llamado Catalunya. Lo tienen verdaderamente difícil.